El libro más vendido, leído y estudiado del mundo, no es El Capital de Marx o La República de Platón y menos la saga de Harry Potter, es y siempre será La Biblia.

Indiferente si crees en el cristianismo o no, La Biblia es un libro que ha transformado la sociedad y ha logrado sobrevivir por cientos de generaciones, sus escritos son considerados atemporales, ya que sin importar en el siglo que vivas sus mensajes y significados tienden a ser inmutables, así que leerla será provechoso.

Pero si ver tantas páginas te desmotiva, te recomiendo darle un propósito adicional que los hábiles lectores deben también aprovechar, y es aprender inglés. Si lo piensas, La Biblia contiene todas las estructuras gramaticales, figuras literarias posibles y un amplio vocabulario para dominar el idioma.

En la página o aplicación Bliblegateway podrás encontrar La Biblia en inglés, busca el libro y capitulo que desees y empieza a leerla, pero para apropiarte de una segunda lengua te recomiendo seguir los siguientes pasos.

Primero busca el capítulo, por ejemplo, Génesis 1-1, luego en el texto ubica la figura de un parlante le das clic y se abrirá otra ventana la cual reproducirá el audio de la lectura.

Escúchalo mientras lees, aunque al principio es posible que no entiendas nada, pero esto permitirá que tu mente comience a asociar el audio con las palabras, mejorando tu listening (escucha) y tu pronunciación, para mencionar bien una palabra debes haberla escuchado antes.

Luego de haber terminado el audio con la lectura rápida de ese capítulo, procede a leerlo ahora con calma, usa un diccionario o un traductor para ayudarte, también al lado del parlante podrás desplegar en paralelo otra versión de La Biblia y que puede ser en español para que te guíes.

Tras haberla leído nuevamente pero ahora comprendiendo lo que dice, intenta escucharla nuevamente mientras haces una lectura rápida, igual que hiciste al principio.

Esto le permitirá a tu mente asociar el audio con las palabras y su significado llevándote al proceso de pensar en inglés. Finalmente léelo de nuevo, pero en voz alta, no te detengas si no estás seguro de la pronunciación o si te olvidaste de algún significado, este paso es para poner en práctica lo escuchado y así mejorar tu articulación.

Si haces esto con todos los capítulos de La Biblia, cuando termines de leerla dominaras a la perfección el idioma inglés.