JORGE PEREZ PAREJO, ESTUDIANTE DE CIENCIAS SOCIALES, UNIVERSIDAD DEL ATLÁNTICO
El periodo de la historia europea que comprende los años de (1830- 1848), estuvo marcado por una serie de sucesos de amplia importancia para la historia de este continente y el mundo. Como primer parámetro de análisis es necesario distinguir el periodo comprendido antes y después de la famosa batalla de Waterloo. Luego de esta batalla, exactamente en el país de Francia las facciones de poder quedaron divididas de la siguiente manera: por un lado existía la antigua nobleza y el alto clero y por el otro lado el surgimiento de una clase media y el populacho. Después de la batalla de Waterloo estos “poderosos” y casi toda Europa temía por el resurgimiento del antiguo régimen napoleónico, por lo cual cada una de estas facciones estructuro su estrategia en medio del cambio que se vivía para este periodo. Es notable que cada monarca de la época, como lo fue Carlos X de Francia se mostrara en total desacuerdo con las diferentes posturas de sus rivales. Este monarca quien desafío y estuvo descontento con los beneficios que daba la promulgación de una monarquía constitucional limitada, se va a ver obligado a renunciar a su cargo para luego ser sucedido por Luis Felipe “rey de los ciudadanos” llamado así por alguno de sus seguidores.
En el caso español y portugués sucedió algo similar cuando fue sucedido en el poder Don Carlos (España) y Don miguel (Portugal). Uno de los hechos más relevantes en el periodo histórico de Europa en el transcurso de estos años fue el papel que desempeño Francia e Inglaterra en el dominio y participación en las actividades políticas y económicas de toda Europa. Cabe destacar que Inglaterra controlaba el comercio y las rutas marítimas en una mayor proporción con respecto a Francia. Otro de los puntos clave que se analiza en este capítulo fue la importancia que tuvo para Inglaterra el ascenso al poder de la reina victoria en el año de 1837. Este reinado duro aproximadamente 64 años en los cuales la historia europea vivió múltiples sucesos. En estos años se da el expansionismo y las políticas de libre comercio y reducción de aranceles en la política económica adoptada por los ingleses, lo cual les permitió intercambiar productos manufacturados y no manufacturados. También es importante destacar la transición del poder que antes estaba basado en una monarquía agrícola y la cual se convierte en una monarquía comercial e industrial. Además es indispensable hacer una referencia a las expediciones de los europeos en el nuevo mundo, nuevo mundo en el cual encontraron una variedad de territorios para llevar a cabo sus expediciones. En este sentido partiremos haciendo una diferenciación acerca del descubrimiento del norte y sur de América, lo cual no debe ser tomado como un hecho aparte en este análisis que se remonta a los últimos decenios de la historia europea de (1838- 1848). En todo caso la intervención de los europeos en Norteamérica.
Los estados unidos de Norteamérica sirvió de mucho para los europeos, y fue un territorio que le permitió a estos llevar a cabo muchos de sus objetivos con respecto a la transmisión de cultural y colonizadora. Otro factor importante en el desarrollo de la historia de Europa para estos años (1830-1848), fue la elaboración de un ideal romántico que se basaba en la valoración de lo sobre humano, la fantasía, la música. Por otro lado surgían las ideas científicas y abstractas que con una forma de ver y conocer el mundo mediante la razón., surgieron grandes pensadores como Diderot y su enciclopedismo. En conclusión la historia europea de este periodo se distingue por los cambios de tipo económico, político y social, los cuales ha repercutido a través de la historia en todo el mundo. Es indispensable destacar los avances que tuvo para la ciencia y el progreso de la humanidad el descubrimiento y estudio de la máquina de vapor y el desarrollo de una burguesía naciente y un proletariado que se distinguía por su capacidad emancipadora., caso distinto y que cabe destacar con amplia diferencia en América latina, en donde el proceso de transmisión cultural ideal y político se baso en una serie de disputas entre los distintitos estados suramericanos.